Foto:Bestofturkey.com
Los orígenes de la capital de Turquía se remontan a la Edad de Bronce y la civilización hatti. Después pasaron hititas, frigios, lidios y persas. En el siglo III d.C., los galos establecieron en Ankara su capital. Y después, romanos, bizantinos y otomanos. Se dice que aquí es donde empezó la viticultura.
Los monumentos de más interés son:
Templo de Augusto en el año 10 d.C. que en el siglo V se convirtió en iglesia y la Columna de Juliano año 362 d.C., situada en Ulus de quince metros de altura y decorada con hojas de acanto.
Templo de Augusto en el año 10 d.C. que en el siglo V se convirtió en iglesia y la Columna de Juliano año 362 d.C., situada en Ulus de quince metros de altura y decorada con hojas de acanto.
El Hisar de Ankara es el casco antiguo de la ciudad, restaurantes y galerías de artesanos ocupan hoy las antiguas viviendas.
Entre el gran número de mezquitas destacan las de Hacı Bayram, siglo XV, Mezquita Aslanhane siglo XIII, una de las mayores de Ankara, y la de Yeni siglo XIV.
Uno de los lugares más visitados de la ciudad es el Anıtkabir, el Mausoleo de Kemal Atatürk, majestuoso edificio de piedra caliza terminado en 1953, y el Museo dedicado al fundador de la República Turca que recoge efectos personales, documentos y numerosas fotografías.
Y de gran prestigio es el Museo de las Civilizaciones Anatólicas con restos paleolíticos, neolíticos, hatti, hitita, frigia, urartu, época romana etc.
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